domingo, 2 de octubre de 2011

Latinoamérica

No eres latino
porque la lengua tuya
saborea idiomas impensados
que no imagina el letrado
ni los versos en español
Desde antes del alfabeto
arrastras sonidos
de luna, de sol,
de montaña sagrada.
Incapaces los traductores,
incapaz el diccionario
de encerrar
en palabra de un idioma
la mixtura de un lenguaje,
mitad vocablo
mitad sueño
y un enorme silencio
que a veces lo cubre todo.

No eres América
porque el bautismo fue extranjero
porque te nombran países,
presidentes, europeos,
porque te nombran desde el Norte
como propia,
y los del sur
nos quedamos esperando
que tu nombre se nos salga de la boca
como un escupo
o como un beso
Tu nombre que se intuye,
que se vive, se respira,
se come con aliño,
de tu propia cosecha
de tierra fértil.

Y así sin querer nombrarte
me asomo a un pedazo de realidad,
carne que tomo de tu vientre
de madre violada y torturada,
de hijos que no entienden
si obedecer al padre,
cuando el padre castiga,
cuando el padre roba,
cuando el padre somete
a sus hijos
a su propia gloria.

Mientras los pueblos,
de los hijos
de los mestizos
te cantan al son,
al tango, el candombe,
la salsa, la cumbia y la samba,
mientras los jefes,
los de arriba,
los de siempre
se sientan en los sillones
de las catedrales,
de las casas de gobierno,
de las lujosas mansiones.
Cuando los mil intentos de libertad
se posan en la geografía con sangre,
los de abajo,
pero los mas,
sobrevivimos en la simpleza de lo cotidiano,
y en la complejidad de mosaico
de esta tierra
que se autoconstruye
palpitando constantemente.



Obra pictórica "Bebiendo sol" , de la serie Buscando América, autora: Natalia Camilo

cordillera

sábado, 26 de febrero de 2011

Gramática del ser

yo no habito los lugares
los lugares me habitan a mi,
sentencia irrevocable
de mi vida todos los años y 1 día,
a vivir en la cárcel de la piel
y en la cárcel de los lugares
que me colman de presencia
con sus objetos
fisicoquímicamente compenetrados en mi
los lugares con su aire, sus colores y texturas
los lugares con personalidad
y cada sitio con su tema

y yo el verbo en la oración en presente imperativo
y el verbo en mi
padecido de lugar
sustantivamente real
subjetivamente mío

y no puedo dar un paso más
sin preguntarle al viento si puedo
mezclarme con su agua
en la humedad invisible,
o quizás deshacerme en humo,
pretérito perfecto,
y no ser más yo
si no un nosotros
que no se antoja pronombre
si no es adverbio de tiempo y espacio

y si se confunde el verso
por un adjetivo calificativo
me anulo en vocal
hasta el día de mi muerte
en que seré parte íntegra
de todos los lugares,
sin punto aparte.
Sin punto final.

Piedad de piedra


la piedad de piedra,
una estructura ausente
cinematográficamente surrealista
por el sueño
por lo inconciente
por la p a t o l o g í a
 

Edipo se pasea con gesto de triunfo

la piedra se queja
en su fisura interna
se sacude el espanto de saberse
piedra